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Mostrando las entradas etiquetadas como fuego

Luna, luna

Luna, luna Hipnotizando la noche entre destellos de nácar; ruborizada y sonriente enamora la mañana.  Gris perla pintados sus ojos; de plata, su sonrisa blanca; cubre con seda la noche para encandilarle el alma refugiándola en su aliento y entre caricias mimarla. Entre cortejo de estrellas y perfumada de amores seduce al firmamento para lucir sus pasiones, avivar sentimientos, y engalanar de colores el camino a su aposento. Luce con sutil elegancia entre matices y tonos el misterio de su viso; dejando huella de aviso para ostentar su arrogancia  llevando a paso de danza enamoramientos y hechizo. Lozana y fresca... desnuda tímida y sensual... serena, desafía sin vanidad la hegemonía de la Tierra. Mecen su sombra las olas, desnuda baila con ellas seduciendo al firmamento quién como viento travieso no quiere que baile sola. Sabiéndose hermosa, sonríe; no pueden darse reproches a una luna enamorada que lleva en su

Desvelos de noche

Desvelos de noche Noche de vela y desvelos corre como agua de rió con ofuscada obediencia y cruza con insistencia miradas con el destino. Sin querer hacer reproches contrarios al pensamiento, quiere que afloren virtudes que dejan al descubierto intenciones y actitudes del alma y su sentimiento. Ni entendimientos taimados, ni ligerezas cohibidas, ni fuegos apagados de causas perdidas que entre pasillos oscuros, juega desapercibida, rozándose con los muros de adivinanzas prohibidas. Intención en la lealtad puso la noche en razón, condición sin conclusión para volver a empezar lo que se quiso zanjar ignorando precaución, para callar por decir lo que sin decir, calló. Palabra y mente, rivales, en noche de plenilunio, juntas no pueden estar, pero aun en distinto suelo por sufrir de desconsuelo, siempre se quieren hablar. Y para evitar verguenza cuando se baten en duelo se cubren con un sombrero que da aire de grandez

Danza de primavera

Danza de primavera Lágrimas de rocío sobre pétalos de seda de tulipanes dorados, granates, malvas y rosados, entre graciosas y prestas adornan la figura, enhiesta, de la primavera que flora a la orillita del río. Despojado ya del frío y adornado con jazmines, rosas, lilas y azucenas baila el sol su primavera a la orillita del río. Danza de fiesta y pasiones de romances y amoríos envuelve con sus misterios historias de amor, hechizos, poemas de enamorados, de enamorados dormidos entre sábanas de seda a la orillita del río. Flor de jara exuberante, que como sin querer ser, fuera, agitanada rociera, dulce , sensual, radiante, y entre volantes plisados da a su cintura brío, linda entre bellas, bailando a la orillita del río. No es el azar ni el destino sino el amor quien confiesa ser cautivo de su trino y su porte de princesa. Princesa que entre las flores mientras riza sus estambres, va cuajando ramilletes como qui